​El arte del lenguaje

Por: Ramírez Ramírez Fatima Sarai.

Hoy en día se tiene el uso del lenguaje principalmente para la comunicación y se tiene por contacto directo una relación con el habla, pero dentro de estas partes existen cualidades a reflexionar. Vemos que la mezcla de lenguaje y acción tiene una función muy específica en la historia del desarrollo del niño, ya que es gracias a esta que se dan otros recursos, herramientas que posteriormente tienen un gran impacto en su vida, de aquí podemos partir su importancia de manera general. 

Para que este desarrollo del lenguaje se de, se debe de pasar por distintos procesos, uno de ellos es la representación activa donde a través del movimiento, existe una representación del mundo en por medio de la acción y es en donde se ha tenido un primer contacto, en este caso los bebés son los principales protagonistas que manejan dicha representación. 

El proceso posterior es la parte icónica, donde a través de imágenes hay una relación de los dibujos con su contexto, existe una abstracción de la realidad y con ello su comprensión, dando así posibles definiciones propias de manera subjetiva, es decir, existe este entendimiento a un nivel de internalización.

Punto crucial en el proceso del lenguaje lo encontramos en lo simbólico, donde todo lo simbólico estará en estado de signos dando un lenguaje más estructurado en relación al mundo, hay una alusión a los objetos inmediatos en donde se puede hacer diferencias de una palabra a otra en esta comparativa, por ejemplo, se diferencia fácilmente (pasando los procesos anteriores) a un perro de una casa al utilizar lo simbólico.



Entonces, tenemos que los signos y las palabras sirven a los niños como un medio de contacto social con las personas desde los primeros contactos, dando instrumentos auxiliares para la resolución de tareas difíciles, a vencer la acción impulsiva, a planear una solución del problema antes de su ejecución y a dominar la propia conducta.

Parte de estas herramientas igual va de la mano con lo emocional y las expresiones dadas por ejemplo, en la parte sonora.




   

Para Hanslick existe una diferencia entre habla y música donde el sonido en el habla es solo un signo, es decir, es un medio para la finalidad de expresar algo que es completamente ajeno respecto a su medio, mientras el sonido en la música es un objeto, es decir, actúa como un fin en sí mismo (Hanslick 1966, 88)

Vemos que dependiendo del mismo contexto y la manera en que intente dar una explicación a lo que se pretende con la música, hay de nuevo un juego entre el medio y el objeto en relación al habla, con ello al lenguaje y así mismo a la misma persona. El objeto puede ser un objeto físico o imaginario, una emoción o percepción sensorial, una experiencia, así como un acontecimiento recordado, en donde la música como sonido humanamente organizado da la posibilidad de incluir el lenguaje verbal, teniendo así el conjunto del sonido y el texto, habla, escritura y dando una producción de música.



Hay una relación entre estas partes con el proceso original dado en el lenguaje y es que, cuanto más compleja sea la acción exigida por la situación y menos directa sea su solución, será importante el papel desempeñado por el lenguaje en la operación como un todo, otorgando más capacidades que se seguirán desarrollando, como lo es en el aprendizaje, punto del cual se desenvuelven otras habilidades.


Referencias:

  • Wertsch, J. (1988). Vygotsky y la formación social de la mente. El método de Vygotsky (pp. 35-74) Paidós.
  • Vigotsky, L. S. (1979). El desarrollo de los procesos psicológicos superiores. Instrumento y símbolo en el desarrollo del niño (pp. 39-56) Crítica.
  • Rojas, P. (2021). Al pie de la letra: una aproximación al lenguaje verbal como parte constitutiva de la dimensión sonora de la música. Resonancias vol. 25, n°48, 2021, pp. 63-86 http://resonancias.uc.cl/images/N48/Separatas/Rojas.pdf

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